6 formas en las que cambiará el lugar de trabajo en los próximos 10 años

Las tendencias en negocios y tecnología actuales muestran que la forma en la que trabajan los empleados (dónde, cuándo, por qué y con quién) cambiará por completo durante la próxima década y tendrá poca semejanza con el trabajo actual.

Los directores de Recursos Humanos (CHRO, por sus siglas en inglés) deben estar preparados para lo que viene. De'Onn Griffin, director analista sénior de Gartner, describe seis ideas sobre la dirección futura del lugar de trabajo y cómo las empresas pueden prepararse para ello.  

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"We Working" eliminará a los responsables intermedios.

Actualmente, los equipos comprenden un grupo de personas reunidas por estructura de informes o ad hoc. Por tanto, el trabajo en equipo se considera más una necesidad de comportamiento, para fomentar el espíritu de equipo y la colaboración, que un principio organizativo legítimo.

Sin embargo, la complejidad y la escala de los objetivos comerciales, en 2028, exigirán la participación de la capacidad intelectual y la experiencia a través de las fronteras de formas más complejas.

“Para 2028, los empleados utilizarán avatares, software de idiomas, interfaces de conversación y de traducción de dialectos en tiempo real para trabajar y hablar con los demás miembros del equipo”.

Por tanto, las empresas gravitarán hacia una nueva filosofía de trabajo llamada We Working. Esta filosofía implica el diseño de equipos pequeños y flexibles en respuesta a cargas de trabajo fluctuantes, plazos reducidos e intensas ráfagas de intercambio y de coordinación de información. We Working animará a las empresas a crear equipos pequeños, autónomos y de alto rendimiento que se formen, converjan, actúen y se desmantelen a medida que cambian las asignaciones. Impulsado por la autonomía y la confianza entre los compañeros del equipo, We Working reduce la necesidad de que los directivos humanos formen equipos y monitoreen su desempeño.

El liderazgo de cambio efectivo requiere a los responsables que trabajen con RR. HH. para invertir en algoritmos que identifiquen habilidades y competencias del trabajador y modifiquen las herramientas del perfil del trabajador para mostrar carteras de trabajo en lugar de cargos. Los responsables también deberán considerar las tecnologías de gestión del capital humano (HCM) para mantenerse al día con las demandas y las realidades de talento.

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La mejora constante de las habilidades y la destreza digital superarán la permanencia y la experiencia.

Para 2028, el trabajo más preciado será de naturaleza cognitiva. Los empleados deberán aplicar la creatividad, el pensamiento crítico y el perfeccionamiento digital constante para resolver problemas complejos. “La demanda de habilidades digitales ha crecido un 60 % en los últimos años. En la actual economía digital, aumentará la demanda de nuevas ideas, nueva información y nuevos modelos comerciales que se expanden, combinan y cambian continuamente hacia nuevas empresas y nuevos negocios”, dice Griffin. “El personal debe actualizar constantemente su destreza digital para satisfacer estas necesidades”.

Para los responsables de RR. HH., esto significa que una proporción cada vez mayor de puestos de trabajo requerirán formación de posgrado. RR. HH. deberá establecer y promover un entorno de aprendizaje continuo, lo que significa que la adquisición de conocimientos y la transparencia en toda la organización deben convertirse en parte de las operaciones diarias. Los empleados, al experimentar con programas no tradicionales, como campamentos de entrenamiento, aprendizaje basado en el consumo, concursos y hackatones, podrán desaprender y volver a aprender constantemente.

Las elecciones de trabajo extremas desdibujarán los límites, las empresas y los amigos.

Los negocios digitales, basados en vastas redes y ecosistemas, aumentarán la distribución del trabajo entre las comunidades de personas y las empresas a nivel internacional.

Para 2028, los empleados utilizarán avatares, software de idiomas, interfaces de conversación y de traducción de dialectos en tiempo real para trabajar y hablar con los demás miembros del equipo a través de idiomas, fronteras y culturas, casi sin pérdida de contexto o significado.

En este tipo de sistema, donde es posible que las personas no se conozcan entre sí, todos se calificarán entre sí en función de la confianza, la competencia y el comportamiento ético, de la misma forma que la gente califica a los compradores y los vendedores en las plataformas de compras.

“La tecnología evaluará cuándo las personas han trabajado demasiado y cuándo necesitan recargarse monitorizando sus biorritmos, requerimientos nutricionales y necesidades de ejercicio”.

Y, a medida que cambia el panorama empresarial, los responsables deben utilizar la tecnología y la información para construir un lugar de trabajo híbrido (físico y digital) que abarque los estilos de trabajo de todos sus empleados, no solo los que tienen un empleo permanente o tienen sólidas habilidades digitales. Los responsables deben considerar el impacto en los valores y la cultura organizacionales a la vez que gestionan la afluencia de talento nuevo y en transición. Deberán tener claros los roles fundamentales, que necesitan continuidad a más largo plazo y conocimiento organizacional, y distinguirlos de otros roles que pueden ser ocupados por empleados temporales.

Las máquinas inteligentes serán nuestros compañeros de trabajo.

Las máquinas inteligentes se están volviendo más inteligentes y ubicuas, no solo al completar tareas previamente reservadas a humanos sino también lo que se pensaba que era imposible para las máquinas.

Para 2028, las empresas empezarán a aumentar las funciones de las máquinas inteligentes, el software, las aplicaciones y los avatares. Los empleados desarrollarán conjuntos de herramientas personales de doppelgangers virtuales: contrapartes virtuales, con la ayuda de la inteligencia artificial (IA), software y dispositivos que son más accesibles para sus actividades personales o en equipo. Además, tendrán la capacidad de llevarse consigo sus lugares de trabajo personales mediante comunidades en la nube, aplicaciones abiertas y asistentes virtuales personales.

La destreza digital extrema será, en última instancia, el modus operandi de cómo trabajarán los empleados en 2028. La creciente demanda de un lugar de trabajo más automatizado ha provocado una combinación asesina: personas y tecnología. Los líderes proactivos deben investigar la forma en la que el uso regular de inteligencia artificial, software inteligente y robots vigorizará la estrategia de trabajo y, para impulsar una ventaja competitiva, se debe alentar a los empleados de alto rendimiento a crear y compartir herramientas de inteligencia artificial o carteras personalizadas de aplicaciones, herramientas y tecnología inteligente para sube el listón de la destreza digital extrema.

Trabajaremos con propósito y con pasión: no solo por dinero.

Cada vez más, los empleados quieren tener un impacto social significativo y lo harán más temprano en sus vidas en lugar de esperar a la jubilación.

En 2028, la gente buscará oportunidades activamente para vincular su impacto y valor en su trabajo a su misión, propósito y pasiones. Ver las publicaciones de otros en las redes sociales motivará a las personas a involucrarse más y a contribuir a la innovación social y la igualdad.

Las empresas inteligentes se volverán más atractivas no solo por el dinero, sino también por ofrecer a los empleados la oportunidad de tener un impacto socialmente significativo a través del trabajo. RR. HH. debe construir un mensaje que resuene y conduzca al compromiso creando iniciativas para que los empleados presenten historias personales, experiencias y éxitos en diversas causas sociales.

Los retos de la vida laboral revelarán un lado oscuro.

Los empleados que trabajan de forma independiente o en ubicaciones remotas se enfrentarán a un dilema: para impulsar la mejora de las habilidades y administrar mejores proyectos, asumirán más asignaciones de trabajo, potencialmente hasta un punto en el que sentirán que están trabajando todo el día. Como respuesta, ya no será suficiente con lograr el equilibrio entre la vida laboral y personal: los empleados se esforzarán por enfatizar la vida sobre el trabajo.

Con el tiempo, la tecnología evaluará cuándo las personas han trabajado demasiado y cuándo necesitan recargarse monitorizando sus biorritmos, requerimientos nutricionales y necesidades de ejercicio.

Sin embargo, habrá aspectos oscuros del equilibrio entre el trabajo y la vida privada en 2028. A medida que la tecnología cierra la brecha entre personas geográficamente separadas, introduce grietas entre las relaciones y las culturas. La distribución remota del trabajo implica que muchos empleados no construirán relaciones sociales en el lugar de trabajo, lo que generará problemas de desconexión y soledad.

Los directores ejecutivos y los responsables de RR. HH. deben trabajar juntos para garantizar que el equilibrio entre el trabajo y la vida personal cambie de un lado a otro para cada empleado a medida que cambian la distribución del trabajo, el tiempo y las etapas de la vida. La capacidad de mirar al futuro hará que el trabajo sea infinitamente más fácil para los responsables de RR. HH.